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Un discurso más preciso

coche y bicicleta

 

Nacho Martín.

Diario Bahía de Cádiz. 25/08/2010.

El presidente Obama, dirigiéndose a toda la nación, dijo la noche del quince de junio que «por décadas hemos hablado de poner fin a la adicción de América con los combustible fósiles, y por décadas no hemos actuado con la urgencia necesaria». Fue un discurso bastante potente y necesario, pero no tan potente como la realidad requiere. Un discurso más informativo, si bien menos popular, habría sido como sigue:

Estimados ciudadanos. El desastre del vertido de petróleo del golfo de México es una consencuencia más de nuestra  adicción al petróleo, y  nuestra adicción al petróleo es una consecuencia de nuestra incurable necesidad de crecimiento económico. Hemos montado un sistema económico que requiere de crecimiento perpetuo para sostenerse, y un crecimiento perpetuo requiere un incremento contínuo de las fuentes de energía.  El petróleo es, a día de hoy, la fuente más poderosa de energía que disponemos. Importantes industrias, como la aviación, la automovilística y la agricultura, dependen íntegramente de él.

Una economía que postula un crecimiento perpetuo requiere también de un incremento contínuo de los recursos materiales y energéticos que usa. Viviendo en un planeta finito dichos recursos son limitados. Esto supone que nuestro sistema está físicamente destinado al fracaso, o al menos a un profundo cambio, para poder adaptarse al mundo físico, a la realidad en la que vivimos. Lo que ha pasado en el Golfo de México es una prueba más. Como el petróleo de fácil acceso se está agotando, pero como necesitamos cada vez más de él, existe una presión tremenda para extraer el que queda en yacimientos de muy difícil acceso. En este caso particular bajo 1.500 metros, casi una milla, de océano. Si hay que buscarlo en esta condiciones, es porque no lo hay ya en otras partes más accesibles, y porque lo necesitamos desesperadamente.

Podemos seguir engañándonos pensando en soluciones milagrosas que resolverán el problema, gracias a quien sabe que tecnologías o invenciones. ¿Dónde están dichas tecnologías? Por una parte la sustitución de las ingentes cantidades de energía extraídas del petróleo con energías renovables parece imposible. La energía «renovable» que más produce, la hidroeléctrica, apenas llega a satisfaccer un 3% de la demanda energética global, y eso a costa de su enorme impacto ambiental. Del resto, no llegan en total al 1%, con la excepción de la biomasa, es decir, la quema de leña, que alcanza un 4% y se produce en los llamados países menos desarrollados. Y para la fusión, o «energía del sol» estamos aún tan lejos como estábamos hace 30 años.

Mientras las grandes corporaciones y la mayoría de los partidos políticos recitan su mantra de crecer más,  cada vez hay menos recursos. La crisis ecológica y económica en que nos encontramos globalmente es una consecuencia más de pedir lo imposible. y querer vivir por encima de nuestras posibilidades. Las soluciones no pasan por el más, sino por el menos. Consumir menos, viajar menos, gastar menos: decrecer. Cómo diseñar un sistema humano que funcione con estas nuevas premisas primero, y como virar desde éste hasta aquél después, son las preguntas que deberíamos estar haciéndonos, en vez de como extender la vida de nuestro actual sistema, manteniendo las cosas estables ahora a costa de destruir los recursos de las generaciones venideras.

P/2010.

PublicPuIARIO Bahía de  Cádiz

4 Comentarios

  1. anticapitalismo anticapitalismo

  2. interesante y preciso

  3. interersante

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